Autoconsumo instantáneo con placas fotovoltaicas: Pormenores y legalidad

Ahora mismo, en España no conviene verter energía a la red; te cobrarán el peaje, además de que no te la pagarán bien. Tampoco puedes almacenar la energía en baterías si estás conectado a la red; ya que aparte de que es poco rentable, está prohibido por el Real Decreto 1699/2011.

Hay una forma de producir energía de forma privada y consumirla en el momento, sin inyectarla a la red general, una modalidad que se denomina autoconsumo instantáneo.

En el autoconsumo total instantáneo, toda la energía generada en cualquier momento del día es consumida directamente, sin vertido a la red. Toda vivienda "normal" tiene un mínimo de consumo a cualquier hora durante las horas de sol, por nuestra actividad normal, a lo que añadimos el consumo de transformadores, stand-by de electrodomésticos, etc. Para una vivienda con 5 kW de potencia contratada éste mínimo estará entre los 100W y 1 kW (1000 W) dependiendo de los electrodomésticos utilizados.

El abaratamiento hasta en un 80% de las instalaciones fotovoltaicas en los últimos cinco años y el incremento de la factura de la luz la han convertido en una opción de ahorro muy interesante en época de crisis. La utilizan desde granjas de vacas hasta supermercados, residencias geriátricas, restaurantes y algún consumidor particular. Cuando no hay sol o viento, hay que engancharse a la red y pagar la factura normal.

Podemos asegurarnos que no se va a verter energía a la red de dos formas:

1. Dimensionando la instalación para que nunca produzca más que lo que consumimos (si tenemos un consumo mínimo en cualquier momento del día de 1000W, podemos instalar paneles hasta 1000Wp, porque rara vez llegarán a esa producción ideal.
2. Instalar sistemas de gestión que nos permiten instalar más potencia pico de paneles, pero que limitará la generación al consumo instantáneo; de esta forma la producción es más estable y abastecerá durante más horas del día el consumo básico de la vivienda. Esta opción aunque no lo parezca también es rentable, puesto que a pesar de la mayor inversión y desaprovecharse parte de la energía generada en horas punta de sol y bajo consumo, permite una reducción mayor del consumo el resto del día, llegando incluso a acercarse al 80% del consumo, garantizando una nula inyección a la red general.

Las ventajas para el consumidor, y el sistema, son evidentes. Se eliminan pérdidas del transporte de la energía al generar allí donde se consume (bajando la intensidad tope que debe soportar la red, por lo que también se reducen gastos de mantenimiento de las redes eléctricas) y se produce en las horas que suele haber más consumo por lo que se reducen los picos de consumo.
El consumidor al tener un máximo menor, también puede reducir la potencia contratada un poco, pero esta posibilidad ya no gusta tanto al ejecutivo.

Marco legislativo

El marco legislativo futuro no está nada claro; pero actualmente al gobierno le da igual si viertes o no viertes a la red, te cobrará el peaje igualmente, parece ser.

Por un lado se apostó por el autoconsumo en el Real Decreto-ley 13/2012 reconociendo la figura del productor/consumidor de energía, y que establece que “en ningún caso tendrán la condición de productores los consumidores acogidos a modalidades singulares de suministro” y se refiere específicamente a “los consumidores que son las personas físicas o jurídicas que compran la energía para su propio consumo. Reglamentariamente podrán establecerse para determinados consumidores modalidades singulares de suministro para fomentar la producción individual de energía eléctrica destinada al consumo en la misma ubicación, detallando el régimen de derechos y obligaciones que de ellas resulten”.

Sin embargo, con la reciente ley del Real Decreto 8/2013 que actualiza la regulación de las instalaciones fotovoltaicas, no sólo no se impulsa el autoconsumo sino que se ponen dos importantes trabas:

• No se reconoce el Balance Neto, es decir, la posibilidad de compensar el exceso de producción de unas horas del día con el mayor consumo de otras.
• Se establece un peaje de respaldo por el uso de la red, que va en función de la producción del sistema fotovoltaico instalado. El usuario deberá pagar por cada kWh que produzca de forma limpia, tanto si la consume como si la regala inyectándola a la red.

Por lo tanto, en teoría toda instalación conectada a red, da igual su tamaño, debe darse de alta (con menos papeleos que antes de 2012, eso sí) y pagar peaje de respaldo, con lo que se desincentiva parcialmente la instalación de paneles fotovoltaicos.

Con los avances de las diversas tecnologías de energías renovables, es de esperar que la energía eléctrica vaya abaratándose cada vez más, y los respectivos gobiernos tratarán de ir aplicando leyes generales que favorezcan a todo el mundo (incluídas eléctricas, mal que nos pese).

Una cosa está clara; el gobierno no podrá impedir que cada vez sean más económicos y eficientes los paneles, de forma que dentro de poco será muy conveniente y rentable la desconexión de la red, ¿o también estará prohibido no consumir?

PD. Si veis algo incorrecto, por favor comentadlo.

Fuentes:
Se privatiza el sol en España
Ingeteam - Autoconsumo instantáneo

El gobierno frena la eficiencia del Autoconsumo