Las fluorescentes, aunque más caras en principio, se amortizan rápidamente por su elevado ahorro, por lo que otra forma de ahorrar para poder pagar la hipoteca es invertir en bombillas incandescentes allí donde van a estar más de 20 minutos encendidas (ya que encenderlas y apagarlas contínuamente acorta su vida útil).
No sólo ahorrarás dinero a la larga (y trabajo, ya que la tendrás que cambiar menos veces la bombilla), sino que evitarás la emisión de CO2 a la atmósfera, que tanto afecta al cambio climático, tan en boga actualmente.
Ah! Y recuerda llevarla a reciclar cuando se funda...
Más referencias:
Entrada en Microsiervos
Revista online Consumer.es
Hay que tener muy en cuenta el mercurio que llevan las bombillas fluorescentes compactas. Sobre todo si hay niños en casa hay que vigilar que no respiren los vapores en caso de rotura.
ResponderEliminarHay que seguir unas instrucciones muy precisas para la recogida de los restos de una lámpara fluorescente rota. En mi casa las he eliminado.